A raíz de la construcción de la Central hidroeléctrica Ralco, un grupo de familias pehuenches cuyos terrenos habían sido inundados por el embalse, se reasentaron en las comunidades “El Barco” y “Ayin Mapu”, pertenecientes a las comunas de Alto Biobío y Santa Bárbara respectivamente. Para estas familias, se acondicionaron predios, construyeron viviendas y se implementaron servicios básicos e infraestructura productiva. En este aspecto, los Sistemas de Agua Potable han sido fundamentales para garantizar la seguridad y confortabilidad de las familias. La alta presencia de niños y adultos mayores obligan a tener un servicio constante de agua, sin interrupciones, y con condiciones sanitarias adecuadas para evitar enfermedades, y mejorar las condiciones de habitabilidad de las familias.
El Proyecto consiste en el mejoramiento de los Sistemas de Agua Potable Rural (APR) de las comunidades El Barco y Ayin Mapu, para los cuales se ha generado un nuevo diseño y una nueva ingeniería. El proyecto contempla, entre otros, un nuevo sistema de potabilización, el cambio de estanques por otros de mayor capacidad, la instalación de nuevas tuberías, la limpieza de las existentes y la posibilidad de suministrar el recurso sin interrupciones.
El proyecto en Ayin Mapu cuenta con resolución sanitaria entregada por el Servicio de Salud Biobío. Próximamente, se ingresarán los antecedentes de la comunidad El Barco para la recepción y declaración de conformidad por parte de la autoridad.
Por otra parte, la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) que permite la operación de la central Ralco, impuso a la compañía una serie de obligaciones con las familias reasentadas, entre estas, el abastecimiento y distribución de agua potable. Al respecto, desde la compañía se ha promovido la autonomía de los comuneros en materias alimentarias, productivas y económicas, por lo que sistemáticamente se ha invitado a la comunidad a hacer un uso eficiente y consciente del recurso, dada la situación de escasez hídrica que se presenta en la zona.
Este proyecto se encuentra alineado con el objetivo 6 desarrollo sostenible impulsado por las Naciones Unidas (ONU) “Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos”.
