Pese a que Qulicura quedó fuera de la edición 2016 del torneo, el delantero valoró todas las enseñanzas que el torneo le entregó, además destacó las amistades adquiridas.
Cuando terminó el encuentro entre Independencia y Quilicura, por los cuartos de final de la Copa Chilectra, Benjamín Aránguiz se sentó en el medio de la cancha y se puso a llorar.
La derrota 4-1 sufrida por Quilicura ponía el fin a su sueño de levantar la copa el próximo 24 de septiembre en el Polideportivo del Estadio Nacional y al de su comuna de conseguir el tricampeonato.
“Ellos eran muy fuertes y nosotros nunca pudimos hacer nuestro juego, nos presionaron mucho y no supimos qué hacer. Lo intentamos pero no se pudo”, aseguró el habilidoso delantero.
Pero más allá de la pena por la eliminación y por no revalidar el título, Benjamín se seca las lágrimas para destacar lo aprendido y vivido en el torneo de baby fútbol más importante del país.
“Jugar la copa Chilectra fue muy divertido, conocí muy buenos compañeros, lástima que sólo llegamos hasta acá”, explicó.
Pero el también cadete del club Lo Barnechea no se detuvo ahí, y aseguró que vivir una experiencia como disputar este torneo, conocer gente y amistades, es algo que ojalá puedan vivir un gran número de niños.
“La Copa Chilectra es una copa muy bonita, ojalá todos pudieran jugarla”, finalizó.