Siena, 13 de Octubre de 2017 – Hoy, Enel Green Power (EGP) inauguró el primer invernadero del alga Spirulina alimentado geotérmicamente en el mundo gracias a la energía renovable de la planta generadora contigua, Chiusdino, en la provincia de Siena, Toscana.
El proyecto se deriva del acuerdo formado en Enero por parte de EGP y del Consorzio per lo Sviluppo delle Aree Geotermiche (Co.Svi.G. o Consorcio para el Desarrollo de Áreas Geotérmicas) para actividades experimentales respecto de recursos geotérmicos aplicados al cultivo del alga.
EGP y Co.Svi.G. invirtieron alrededor de 100.000 euros cada una en el proyecto. La meta de la iniciativa es exhibir el potencial del calor geotérmico en sectores aparte de la generación de energía, al mismo tiempo de crear nuevas oportunidades de empleo y de ingresos ambientalmente amistosas. Se espera que los resultados de este proyecto piloto estén disponibles para comienzos del verano de 2018.
El calor requerido para el crecimiento de las algas en el invernadero experimental de 125 m2 es un subproducto de las actividades de generación geotérmica de EGP, evitando la necesidad de construir una instalación de calefacción designada especialmente para el invernadero. Un intercambiador de calor recibe agua caliente desde la planta de Chiusdino y la transfiere a los estanques del invernadero, donde las algas crecen a una temperatura óptima entre 25º y 35º C.
Otros actores involucrados en el proyecto de cultivo de algas son la Universidad de Florencia y el Concejo Nacional para la Investigación de Italia (CNR).
El cultivo de Spirulina tiene un elevado valor comercial, con una producción mundial de alrededor de 90.000 toneladas anualmente, casi exclusivamente concentrada en Asia (fuente: FAO), y es esencial hacia la producción de ciertos bienes de elevado valor agregado absorbidos por mercados de nicho norteamericanos (ingredientes alimentarios, alimentos saludables, bio-combustibles, cosméticos y farmacéuticos). La Spirulina ha comenzado a entrar a Europa en los últimos años, resultando en una mayor demanda y más aplicaciones dentro de los campos de los bio-fertilizantes, la bio-rehabilitación, el tratamiento de aguas residuales y en la industria química.
La planta geotérmica de Chiusdino, la cual fue inaugurada en 2011, que cuenta con una capacidad instalada de 20 MW, es capaz de generar más de 150 millones de KWh anualmente, equivalentes al consumo eléctrico de 70.000 hogares. La energía renovable generada por la planta cuenta con la capacidad para evitar las emisiones de alrededor de 100.000 toneladas de CO2 y de ahorrar 32.000 TOE (equivalentes a toneladas de petróleo) anualmente.